MIRELLA

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Lo que hay en la Avenida...=

En torno a las categorías latinas de los Grammy anglosajones...

Nunca me cansaré de decir que los señores de la Academia Norteamericas de Artes y Ciencias de la Grabación (NARAS, por sus siglas en inglés) instiyuyeron las tres categorías (pop latino, tropical y regional mexicana) en que compiten las producciones discográficas realizadas en el mercado hispano sólo para acallar el reclamo de los más de 28 millones de latinoamericanos que habitan en Estados Unidos. Porque la verdad es que en el evento de los premios Grammy todavía no respetan a los artistas de nuestro origen e idioma. ¡En sus galas se ve cada disparate...!

Tradicionalmente, los agraciados con el galardón en dichos renglones son los pocos ̶ y casi siempre los mismos ̶ que hace bastante tiempo lograron realizar el crossover y, si estrellas como Juan Luis Guerra (1993) y Luis Miguel (este año) los obtuvieron, fue porque sus éxitos y la exposición a nivel mundial que disfrutaban al momento eran monumentales. Aun así, al mexicano le negaron el Grammy que mereció hace tres años por su álbum 20 años (WEA Latina, WH-71535-A), premio que, si mal no recuerdo, le regalaron a José Feliciano por su interpretación de Porque te tengo que olvuidar (EMI 4928).

Con el perdón de aquellos que se creen más patriotas que nadie, me atrevo asegurar que Feliciano sólo ha merecido el Grammy por su disco Escenas de amor (Motown Latino 6018II ), editado en 1982 Desde entonces no ha sido capaz de ofrecer otra producción verdaderamente memorable. Los otros cinco Grammy que adornan su resumé han sido generosos regalos de los cocorocos de NARAS... simplemente porque éstos saben quién es.

De las chicanas Vikki Carr y Linda Ronstadt puede decirse lo mismo. Cierto es que ambas baladistas merecen el prestigio que disfrutan, pero ni remotamente representan lo máximo cuando se les ocurre grabar en español. Y a ambas les han regalado premios Grammy.

Este año, Vikki sobraba en las nominaciones. Al igual que Feliciano, María Conchita Alonso y las Triplets, trillizas chicanas que tendrían mejor futuro como coristas de cualquier figura más o menos importante. La selección de Luis Miguel dentro de la categoría Pop Latino fue la más acertada (entre los nominados), a pesar de que su reciente propuesta, Aries (WEA Latina, CM-7366), tampoco fue lo mejor del '93.

Y... ¿Gloria Estefan? Otra bendecida con la generosidad de unos señores que, posiblemente no entienden ̶ quizás ni siquiera escuchan ̶ "un divino" de música tropical (el término correcto debe ser caribeña). Pero, tratándose de una figura "agringada" que tuvo más suerte que méritos para caer en gracia en el ambiente pop anglosajón hace más de una década, su triunfo, aunque inmerecido, era predecible. Por otro lado, no les pareció "raro" que, a diferencia de quienes la precedieron como ganadores, haya sido la única que participa y recibe el galardón en la gala de entrega que se televisa?

Gloria Estefan es una artista luchadora, carismática, disciplinada, posee una voz bonita y muy agradable. A ello súmenle todas la virtudes que a ustedes se les ocurra enumerar. Sin embargo, es una verdad del tamaño de un templo (Dios sabe que no exagero en lo más mínimo) que existe un desbalance monumental entre sus méritos artísticos y el extraordinario éxito que disfruta. Esta cubana no es, no ha sido ni jamás será la súper cantante que le han logrado vender a fanáticos que, sin duda, jamás han escuchado vocalistas de alto calibre.

En cambio, esta vez me pareció muy justa le selección de Selena como merecedora del Grammy dentro de la categoría Regional Mexicana por su álbum Live! (Capitol / EMI Latin, H20777 7 42770 02). Esta muchacha sí es una maravilla en lo suyo. Quién sabe. Tal vez los votantes adivinaron en su apreciación.

Considero que NARAS ganaría respeto si instituyera un jurado compuesto por renombrados conocedores de la música latinoamericana y delegara en ellos la tarea de elegir, atinadamente, los tres ganadores anuales.

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La toalteña Mirella triunfó en el evento

La Nueva Vedette de Puerto Rico.

Surge en el momento más oportuno

Mirella, triunfadora en el recién celebrado evento La Nueva Vedette de Puerto Rico, surge en un momento en que el ambiente del espectáculo boricua clama por una nueva figura, de verdadero arrastre popular, exponente de esa disciplina artística. Hoy alejada del panorama quien fuera más fulgurante estrella del vedettismo a nivel nacional, Iris Chacón, sólo quedan activas Lourdes ̶ hermana de Iris ̶ y Denissa. Éstas, por los años que llevan de trayectoria, obviamente ya no representan novedad.

La escultural joven que ahora nos ocupa llega con la determinación de establecer su nombre en el mundillo artístico. Para ello se está preparando en las facetas de Canto y Baile.

— Antes había estudiado Actuación Dramática con doña Esther Sandoval y he sido modelo. Además, fui protagonista de la producción teatral Travesía taína, que tuvo mucho éxito. Pero, en realidad, lo más que anhelaba era bailar. El vedettismo siempre me atrajo..., expresa esta novel vedette, cuyo nombre completo es Mirella Ojeda Agosto.

Nacida en Toa Alta, el 25 de enero de 1974, la también estudiante de Ciencia Ambiental en la Universidad Central de Bayamón (cursa el Segundo Año) asegura que nunca fue fanática de alguna vedette famosa, aunque sí asidua televidente de El show de Iris Chacón, trasmitido por WAPA TV / Canal 4.

— Soy una bailarina natural, pero quiero pulirme en el baile con estudio formal. Considero que debo prepararme lo más que pueda porque mi intención, si Dios me lo permite, es dedicarme a esto por completo..., puntualiza la hermosa trigueña, de 5'8" de estatura y, medidas anatómicas, 36-26-37.

Para desencanto de su ya creciente ola de admiradores, nos confiesa que tiene novio. Sin embargo, prefiere no profundizar respecto a su vida romántica.

Revista Artistas. edición 409, marzo 25-abril 7, 1994.